TRES DE CUATRO, UN MAGNÍFICO REGALO DE REYES
Gran éxito el cosechado por nuestros judokas el día de Reyes en Béziers; nada más y nada menos que tres medallas de cuatro participantes, que bien pudieron ser el pleno total si nuestro cadete Iván hubiera logrado superar la ronda de cuartos. Nuestra expedición que partió el 5 de enero acompañados por Raúl y Cristina, tuvo una destacada actuación.
Empezó bien la mañana con la categoría sénior en donde Sergio Ibáñez conseguía una muy meritoria medalla de Bronce en la categoría de – 66 kg. Pese al contratiempo del pesaje, en el que se había informado de que había un margen que luego no se aplicó, y la contrariedad de competir en un peso no habitual al suyo, nuestro representante realizó un campeonato extraordinario en el que se mostró muy fuerte físicamente y en donde se le vio un judo diferente con técnicas nuevas que le dieron victorias de gran mérito. Una medalla muy importante que supo a poco, ya que en las semifinales debió resultar vencedor con un ipponazo que los árbitros no quisieron ver.
A continuación entraron en liza nuestras féminas, Andrea Sebastián en la categoría sénior de – 70 kg. y María Murillo en la categoría cadete en -48 kg .Andrea, obtuvo una medalla de plata espectacular, venciendo todos sus combates por ippon con un gran dominio de la situación. Se la vio muy rápida y físicamente al alza. En la final, con una rival muy fuerte, no pudimos ver todo el potencial de nuestra judoka ya que un golpe en la nariz, nada más empezar el combate le produjo una hemorragia nasal importante, que nos hizo temer lo peor y le obligó a abandonar. Pese a ello gran actuación de nuestra campeona, que demostró que poco a poco va cogiendo la forma y el nivel de antaño.
María Murillo, consiguió una medalla de Bronce de muchísimo valor. Ya decíamos que nuestra cadete venía realizando un gran trabajo, que tarde o temprano éste tendría que salir y así fue. Las horas de entrenamiento y sobre todo las sesiones diarias y dobles en estas vacaciones navideñas han servido para afianzar el judo y la confianza de nuestra cadete, a quien aún le queda un largo camino por recorrer. María se mostró muy segura en todos los combates, y empezó a soltarse con técnicas y combinaciones nuevas trabajadas en los entrenamientos. Salió con otra actitud, a competir y eso se notó. Cuatro combates y una derrota en “semis” que le dieron un merecidísimo premio.
Por la tarde, nuestro cadete Iván González, entró en liza y a punto estuvo de darnos el pleno de medallas si la suerte le hubiese acompañado un poquito en los cuartos, donde un error infantil, le privó de las preseas. Nuestro representante en – 60 kg. tuvo una excelente actuación. Sereno y muy templado, consiguió pasar como primero en su liga, para posteriormente realizar un extraordinario combate de octavos, con dos acciones espectaculares. En cuartos, cuando llevaba el combate dominado y controlado, un despiste muy bien aprovechado por su rival dio al traste con las opciones de nuestro judoka y le privó de la medalla. Buen test y gran inyección de moral, para este gran deportista, dentro y fuera del tatami.
Y así se cerró nuestro primer campeonato de la temporada, con una plata y dos bronces, que nos hace empezar el año como lo acabamos en el podium y con medallas, pero me quedo con lo mejor, la convivencia del grupo, la piña que hizo el equipo, el judo exhibido por nuestros judokas, la imagen ofrecida por todos ellos y en especial nuestros sénior, a los que se les vio muy bien físicamente y muy ordenados tácticamente. Y… TRES DE CUATRO, UN MAGNÍFICO REGALO DE REYES.