DOS OROS, UN BRONCE Y UN BUEN TRABAJO
Dos oros y un bronce que premian el buen trabajo de nuestra sección júnior y sénior, son el resumen del torneo de Tarbes al que acudimos este fin de semana con Andrea Sebastián, Estelle Olivier, Sergio Ibáñez, Daniel Sierra y nuestro amigo austriaco, Leon Nussbaumer. Nuestro programa de tecnificación empieza a dar sus resultados. El pico de la pirámide empieza a rendir en la que es para mí, la etapa de alto rendimiento, el júnior y sénior. Y así lo tenemos planteado en Judo Club Zaragoza, infantil y cadete etapas formativas. Júnior, sénior etapas de alto nivel. Grandes resultados los obtenidos por nuestros júnior y sénior de Judo Club Zaragoza en Tarbes que me hacen sentir muy orgullosos y animan a seguir trabajando, porque este programa empieza a carburar.
Estelle Olivier campeona, con cuatro victorias en cuatro combates, excepcional y con unas técnicas preciosas. Tuvo su día y demostró su mejoría y avance en el plano técnico en estos años que lleva en España, contagiándonos de su capacidad de sacrificio, esfuerzo, simpatía y discreción.
Andrea Sebastián en su vuelta a la competición, campeona. De nuevo juntos, reverdeciendo viejos laureles fue de menos a más, cinco victorias en cinco combates, espectacular control de la situación en la final. Con mucho oficio y saber hacer, supo aplicar a cada rival, la táctica adecuada. Consciente de sus posibilidades, reguló sus energías de manera excepcional y sus victorias fueron de gran mérito, ante rivales de gran nivel y fortaleza.
Sergio Ibáñez, bronce con dos victorias de cuatro combates pero con técnica de muy alto nivel, le faltó un poco de concentración pero estuvo francamente bien. Me quedo con el Golden Score de cuartos de final, que resolvió magistralmente con una técnica preciosa y explosiva.
Dani Sierra, perdió sus dos combates de liga pero compitió y luchó hasta el límite. No le puedo pedir más a un alumno que es todo un ejemplo de tesón y esfuerzo dentro del tatami. Ya el animarse a competir fue un logro importante.
Nuestro amigo austriaco Leon fue quinto, un resultado que no se ajusta al judo exhibido y sus méritos. Demostró ser un judoka valiente y poderoso en su judo pero un fallo arbitral de bulto, le sacó de la lucha por las medallas.
El apoyo y seguimiento de Raúl Clemente, de diez.
También nos acompaño nuestro amigo de Judo Binefar, Alvaro Antoñanzas, que realizó un buen torneo logrando en bronce.
Sin duda un comienzo espectacular que premia el trabajo de muchos años, el cambio cualitativo y cuantitativo de nuestro programa y que confirma mi forma de pensar acerca de cuándo aplicar sistemas de entrenamiento y enfoques de alto rendimiento, para mí en particular, en júnior y sénior. Para muestra, DOS OROS Y UN BRONCE.